La fruta es uno de los alimentos más completos, con un alto contenido en vitaminas y minerales, y por eso debemos intentar incorporarla en la dieta de nuestros hijos. Además, contienen una gran cantidad de antioxidantes naturales y fibras, y un gran contenido de agua.
Por eso, a muchos padres les preocupa que a sus hijos no les guste la fruta, ¡y no es para menos! En la medida de lo posible debemos intentar que los pequeños coman de 3 a 4 piezas de fruta al día, y aunque para muchos pueda parecer una odisea es posible.
Aquí os dejamos algunos consejos..
Empezar desde pequeños.
Una de las claves para que a nuestros hijos les guste la fruta y tengan el hábito de comerla es que se acostumbren a comerla desde pequeños, en las papillas de frutas o purés para bebé..Si no toma papillas, a trocitos a partir de los 6 meses. Es la mejor manera de introducir los justos y texturas nuevas y que crezcan con ellas. Siempre debemos dar la fruta sin azúcar añadido.
Tenerla siempre a vista
Es super importante que la fruta esté siempre en un lugar visible para nuestros hijos: encima de la mesa, en la encimera, en la nevera… Así los niños la tienen presente a todas horas y pueden pedirla ellos mismos cuando les apetece.
Ensaladas de fruta siempre a punto.
Otra técnica infalible es tener siempre preparado un bol de fruta cortada a trozos en la nevera, para que los niños puedan comérsela a todas horas.
Fuera de la vista los dulces.
Igual de importante que mantener siempre a la vista del niño la fruta es esconder aquellos alimentos que puedan hacerle “la competencia”. Es decir: galletas, yogures y demás cosas que puedan resultar más apetecibles para el pequeño.
Ofrécele algún zumo natural.
La fruta en forma de zumo siempre es más atractiva para los niños. No existe inconveniente alguno en ofrecerles zumos siempre que sean naturales, pero hay que tener en cuenta que de esta manera aumenta la concentración de glutamina (azúcar). Aún así, no hay problema si de las 3 o 4 raciones de fruta al día, una de ellas es en forma de zumo natural.
Dar ejemplo.
Y por último, y super importante, los padres debemos dar ejemplo ya que, como en todo, el pequeño va a imitar aquello que nos vea hacer. Por lo tanto, debemos consumir fruta diariamente delante de nuestros hijos. Nunca está de más bajar a la tienda de fruta a por algunas piezas. También debemos intentar que esta fruta sea de temporada y sea variada.
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